jueves

Cristina no lo quiere a Boudou en el 1M y lo manda a Uruguay



EL VICE COMPLICADO EN LA JUSTICIA

Así evitará la incómoda foto en la apertura legislativa, en la que el vice suele recibir a la Presidenta. Ya le avisaron que ese día tiene que representar al país en la asunción de Tabaré Vázquez. 

La semana pasada, la Cámara Federal confirmó su procesamiento en el caso Ciccone, lo que lo dejó al borde del juicio oral. Y ya el vicepresidente tiene complicaciones con otras causas, como son la de un auto con papeles “truchos” y la de enriquecimiento ilícito.
Toda esta situación de descrédito del vice elegido por la propia Cristina, hizo que hoy esté aislado y sin apoyo político, algo que Boudou reclamó hace pocos días en la Casa Rosada ante Jorge Milton Capitanich.
Ahora, el vicepresidente suma otra negativa; no estará este domingo en la apertura de la última Asamblea Legislativa que encabezará Cristina como Presidenta pues deberá viajar a Uruguay a la asunción de Tabaré Vázquez.
Boudou irá a la ceremonia de asunción del nuevo presidente uruguayo como representante del Gobierno argentino y no estará junto a Cristina en el Congreso.
Así, los que recibirán a la jefa de Estado el próximo domingo 1° de marzo, serán el presdiente provisional del Senado, el santiagueño Gerardo Zamora, y el presidente de la Cámara de Diputados, Julián Andrés Domínguez, junto a una delegación de legisladores nacionales de diferentes fuerzas.
Boudou queda así desairado una vez más por la administración kirchnerista, quien no quiere hoy una foto de Cristina junto al devaluado vice. Y la excusa del viaje a la asunción del sucesor de José Mujica encaja a la perfección.
De todos modos, Boudou está afuera de cualquier decisión en el ámbito legislativo. Por lo pronto, la organización de lo que pasará dentro del Congreso ya está a cargo de Aníbal Fernández, pues el Gobierno quiere tener controlado cada detalle en esta Asamblea Legislativa.
Allí, aparece la acusación de Elisa Carrió sobre un rol activo del Ejército Argentino en el cuidado del Palacio Legislativo, lo que supondría la aparición en escena de César Milani.
Pero Boudou está lejos de todo esto y el sábado, ya partirá hacia Montevideo en un nuevo rol protocolar alejado de la activa vida política con la que soñaba en 2011 cuando fue ungido vicepresidente de la Nación.

martes

“La Argentina no acompaña un carajo la integración de la región”

El presidente de Uruguay, José Mujica, aseguró que “la Argentina tendría que acompañar” la integración regional “pero no la acompaña un carajo”, a la vez que se quejó de que “cuando tiene viento de cola, la Argentina se olvida de la integración”.

El proyecto integrador tiene 200 años, desde San Martín, Bolívar, Artigas, pero los partidos de izquierda hemos sido tan torpes que eso no es una bandera popular; en ninguna parte de América Latina hay una manifestación de masas peleando por la integración”, sostuvo el mandatario oriental.
En ese sentido, Mujica consideró que la integración regional “apenas tiene un barniz de carácter intelectual, pero no está integrado como una necesidad histórica básica”.
A una semana de concluir su mandato y ser sucedido por el también referente del Frente AmplioTabaré Vázquez, el presidente uruguayo subrayó que “los más integracionistas son los países chicos”.
“Por necesidad, porque vamos corriendo de atrás. La integración precisa un liderazgo, y ese liderazgo se llama Brasil, pero la Argentina tendría que acompañar, y no acompaña un carajo, más bien lo contrario, es como si la Argentina se hubiera retrotraído a una visión de 1960″, se quejó el oriental en una entrevista con el diario Perfil.
Y agregó: “En cuanto tiene el viento de cola, la Argentina se olvida de la integración, cuando le va bien las cosas agarra para otro lado”.
Sin embargo, Mujica aclaró que Brasil tiene una postura similar a la de la Argentina y recordó una frase que le dijo la mandataria Dilma Rousseff.
“Una vez la presidenta de Brasil me dijo: ¡Ay, Pepe! Con la Argentina hay que tener paciencia estratégica… “, contó el jefe de Estado uruguayo.
Asimismo, destacó que “en América del Sur, y en toda América Latina, hay un gran desafío por delante” y explicó: “Si no creamos mecanismos que nos vayan integrando, que nos puedan dar una presencia internacional de peso, vamos a continuar como hojas sueltas en el mundo”.
“En los países determinantes de América Latina, Brasil, la Argentina, México, los dirigentes hablan y asumen un discurso integracionista, pero desde el punto de vista práctico, están metidos hasta las orejas en las contradicciones del Estado nacional”, manifestó.
Y concluyó: “Hacia afuera, hacia los otros países de la región, se conducen según sus tensiones internas”.

La invención del Partido Judicial


La invención del Partido Judicial
Con astucia La Doctora plantea la invención del Partido Judicial.
Tergiversa la gravedad de la causa para condenar el efecto. Y le sirve para minimizar a la oposición real. Desplazarla del escenario.
Repite, con la creación del flamante PJ, el mecanismo suicida de confrontación con el Grupo Clarín. Opositores abstenerse.
Tanto Massa como Macri, Cobos, Sanz, Carrió o Binner, debieran preocuparse por un ejercicio del ninguneo tan original.
Es la mejor manera de degradarlos. Convertirlos en complementos, figurines o extras.

Etapa lazarista

El inventado PJ es, en todo caso, el efecto. La consecuencia.
La causa remite a aceptar que, durante la década kirchner-cristinista, se robó con encomiable apasionamiento y tenacidad.
Puede percibirse durante el esplendor de la presente etapa lazarista del cristinismo (cliquear). Con los regalitos envenenados del extinto.
La Doctora padece el rigor adverso de la etapa lazarista. Con la conjunción de escatologías recaudatorias que se llevan puesto su gobierno. Por corrupto. Y no por “revolucionario”.
La invención del Partido JudicialLa pobre aún no encuentra la manera de enfrentar esta etapa. No se atreve, acaso “por los chicos”, a matar al muerto. Ni siquiera para salir del paso. Sin embargo, mientras “lo homenajea con palabras, lo descalifica con los hechos”. El caso emblemático lo representa el atentado a la Amia, con el respectivo cambio geopolítico. Donde lo hace quedar, al extinto, como un estadista satelital. Un equivocado que asimilaba, a los gritos, el alimento enlatado que le preparaba la CIA y el Mossad.
Para colmo, para consolidar la gravedad de la causa, a la sistematización del robo apasionado se le debe agregar la sospecha consensuada del asesinato. Por haberse cargado al fiscal Nisman. Al que no paran de descalificar, como si no se dieran cuenta que el asesinado ya mantiene la pureza de Ceferino Namuncurá. “Nada mejor que la muerte para mejorar una vida”, escribió Borges.
Pero les cuesta históricamente hacerse cargo del muerto que se cargaron.
Sin reparos, en los diarios principales ya se alude al “comando venezolano-iraní”, con “cierta logística doméstica”. En realidad, lo que preocupa es la “logística doméstica”, más que la fantasía literaria del sicario. Sea persa el sicario, de nuestro suburbio o bolivariano.
Esta logística que consagra el miedo letal de los empresarios, de los profesionales, o de cualquier señora sensible y normal que haya marchado con uno de los tantos “paraguas del hartazgo” (cliquear). La creencia tétrica de que en la Argentina se atravesó la frontera del delirio. Y arriba -otra vez- la “instancia de las boletas”.

“Temporada en el infierno”. Rimbaud

Con la causa tergiversada, La Doctora prefiere maldecir el efecto. El Partido Judicial. Son los expedientes gravitantes que se amontonan como consecuencia del ejercicio delictivo, que se silenció durante los primeros años del flagelo devastador. Entre 2003 y 2008, mientras se imponía el modelo de inclusión, que incluía la rutina de valijas que signa la actual etapa lazarista. Hasta que El Furia, irresponsablemente, se peleó con quien más colaboró para que los delitos recaudatorios pasaran inadvertidos durante el primer lustro.La invención del Partido JudicialEn adelante la sonoridad por los escándalos fue superior. Desde Antonini Wilson hasta aquí. Con éxtasis temáticos, como los deparados por Boudou, El Descuidista. En la materia, el cristinismo pasa su “temporada en el infierno”. Como el poeta Rimbaud.
Hoy La Doctora combate el efecto sin reconocer la causa que tergiversa.
En su imaginario, el Partido Judicial se alía conspirativamente con la “prensa concentrada”. O sea Clarín, y en menor medida La Nación. Y exhibe a la sociedad el rostro de los dos verdaderos enemigos. A los que combate, desde el atril, “almidonada y compuesta” (cliquear), y desde el facebook. Clarín y La Justicia, en ese orden. “Corporaciones” que cometen el estrago de arrinconarla.
La Doctora plantea la ofensiva, contra el Partido Judicial, consciente que la réplica estará en los expedientes. Entre citaciones e indagatorias. En procesamientos que instalan a la institucionalidad en el plano de la vergüenza.
Para presentarse como víctima del golpe blando. Un golpe no militar, diferenciado de los melancólicos golpes anteriores que no pueden provocarse más. Constituye, después de todo, un avance.

Rutina de recuperaciones

“La Marcha del Silencio se agota en la impresionante realización”.
Sin continuidad, sin canalización política, sólo resta aguardar la reacción del cristinismo.
Entonces La Doctora huye hacia adelante. Se dispone a pasar por arriba las dificultades. Apuesta, otra vez, por la rutina de la recuperación.
Para aproximarse a otra tesis permanente del Portal. Indica que el cristinismo debe entenderse a través de sus recuperaciones. De sus caídas. Las que fueron tan memorables como sus levantadas.
La invención del Partido JudicialAunque el cristinismo, en el ocaso, se encuentre severamente averiado. Internamente aislado, encerrado en la patología de los incondicionales. Y con el tiempo reducido.
Se obstina La Doctora en concentrar la iniciativa y sin dejarle nada de aire artificial al que está mejor posicionado para intentar sucederla. Scioli, Líder de la Línea Aire y Sol. No alcanza a despegar porque La Doctora decide convertirse en el peor obstáculo. Lo maltrata y desacredita. Su obstinación y sus gestos tampoco lo favorecen a Florencio Randazzo, El Loco.
Por lo tanto cuesta evitar que prospere la evaluación que implica también otro malentendido. Indica que La Doctora, en el fondo, es funcional a Mauricio Macri. Peor aún, lo prefiere como sucesor. Es su indirecta jefa de campaña (ver “Romance del Mauricio y La Doctora”, cliquear).

Debacle del PJ real

El PJ, la invención del Partido Judicial, contiene la carga emotiva que le falta al ya inofensivo PJ, el Partido Justicialista Vegetal, que La Doctora arrastra atado al pie de la humillación. Con sus dirigentes envueltos y desprestigiados que ni tienen fuerzas para reaccionar. Ni siquiera pueden reconocer que es tarde para ensayar alguna toma de distancia digna. Se encuentran entrampados, ensimismados en la estrategia frontal del fracaso. Al extremo de solidarizarse con el próximo intento de recuperación. Aunque se encuentran peleados con muchas más corporaciones de las necesarias. Tampoco se atreven a puntualizar que el peronismo, en su versión peor, nunca fue algo parecido al presente descalabro.
La invención del Partido Judicial“El peronismo es un instrumento para tender puentes económicos y sociales”, confirma la Garganta. “De ningún modo para dinamitarlos”. Por carencia de arrojo e ineptitud.
Apenas José De la Sota, y en menor medida Adolfo Rodríguez Saa, o Romero, Verna o Puerta, y algunos más, se libran de la responsabilidad compartida. Por la debacle del peronismo que se arrastra, aferrado a La Doctora, hacia su sepultura. Y acaso sea, en definitiva, para bien.

La Argentina que banca



La Argentina que banca

Los paraguas del hartazgo

Vaya un reconocimiento hacia los fiscales. Cumplieron con el tributo ético a Alberto Nisman, el colega muerto. Y soportaron los agravios desesperados como las tergiversaciones más insólitas. Con una entereza para rescatar.
Vaya también un reconocimiento para Julio Piumato. Por la eficiente capacidad de organización de los empleados judiciales. Facilitó el despliegue de la sociedad conmovida.
Los fiscales llegaron “hasta aquí”. El éxito de la convocatoria les marca, asimismo, la línea de llegada. Para volver empapados hacia sus despachos con la satisfacción del deber cumplido. Con la certeza de haber brindado un ejemplo. Permitieron la emoción saludable de la sociedad blanca y sensible que paga por sus impuestos y espera, surcada por el hartazgo. Un agotamiento que no encuentra, aún, la respectiva canalización política. Un item que, en todo caso, excede a los fiscales.
La Argentina que bancaLa Marcha del Silencio se agota en la impresionante realización. Con una intensidad que, por una razón física -como sostenía Edgar Poe- es necesariamente breve.
En adelante, es el turno de los políticos. Los que se lucieron, paradójicamente, con el recogimiento aconsejable del perfil bajo. Con el mérito de pasar inadvertidos entre la gente que homenajeaba a Nisman, mientras reclamaba contra la impunidad.
Desde Massa a Macri. O desde Cobos o Binner a la señora Carrió. Son los exclusivos responsables de trasladar, hacia la esfera electoral, el hastío de la sociedad que oposita, y que clama por encontrar al opositor que la represente.
Son conscientes que deben recibir, como herencia, los riesgos de una sociedad hastiada. Pero con sus simultáneos beneficios. Se trata de una sociedad necesitada de creer en alguien. En algo. Para ser, de una vez por todas, gobernada. Pero no conducida. No es ningún rebaño.
Es una sociedad de decepción rápida, se encuentra siempre capacitada para tolerar otra frustración.

La Doctora pierde la iniciativa

Después de la catarsis, todo va a seguir ilusoriamente igual. Con el país estructuralmente dividido e irreconciliable. Con el cristinismo que resiste los embates de la realidad, apostado entre los medios de comunicación. Y con la estoica mayoría que se radicaliza en el Legislativo. Que ayuda para proporcionarle fachada legal a cualquier verdura. Como a la nueva ley de inteligencia.
Son los diputados los que ayudan a La Doctora a recuperar la iniciativa. Es el sentido de impactar, mientras aún no se cerraron los paraguas, con la convocatoria al Fiscal Pollicita. Para que presente los osados fundamentos de la imputación a La Doctora. Ante los diputados del Frente para la Victoria. Lo aguardan a Pollicita, en apariencia, sin los “tapones de punta”.
La Argentina que bancaOcurre que La Doctora perdió el control de la calle. Pero perdió también la iniciativa, como la credibilidad. Entre las vacilaciones que se instalan en los altibajos de su agenda. Desde la muerte de Nisman circula detrás de los acontecimientos. Se va con la misma incertidumbre con que vuelve. Sea a El Calafate -Ciudad Kohinoor-, o a Chapadmalal.
La insoportable perentoriedad de la Marcha del Silencio la desequilibró hasta caer en el exceso de reinaugurar lo doblemente inaugurado. La planta de Atucha sirve para tratar el cambio geopolítico que impulsa, en el ocaso del ciclo paranoico.
La Doctora se atreve a homenajear con sus palabras a aquel que descalifica con sus acciones. El marido extinto, El Furia.
De blanco, “almidonada y compuesta” (cliquear), muestra el libro publicitario. Con una página dedicada al general Perón (a quien recurre en los momentos de retroceso) y luego con otra página. De Kirchner. Él. Lo llena de adjetivos mientras, sin piedad, lo masacra con acciones.
Para entender el fenómeno de la descalificación sirve como marco el crimen de Nisman.
Una de dos, La Doctora nos miente ahora, o El Furia nos mentía hace ocho años. Cuando Kirchner utilizaba sus minutos sustanciales en el plenario de las Naciones Unidas, para degradar a Irán. A los efectos de seducir a los Estados Unidos que necesitaban aquel discurso. El pobre suponía que, con semejante petulancia, podía aferrarse al Occidente que razonablemente le desconfiaba.
La Argentina que bancaO aquel Kirchner era un nabo que nos convertía en meros instrumentos satelitales de Estados Unidos e Israel -inspirado en las fundamentaciones que le acercaba la dupla Nisman-Stiusso-, o La Doctora es una irresponsable que, en el final del mandato, en la etapa lazarista, decide atarse al carromato persa de la utopía antioccidental. A través de un entendimiento bastante insuficiente con Rusia o con China (potencias que tienen un discurso más racional y claro) y con la obstinada alianza con Venezuela. Una patología que la ata, estratégicamente, a Irán. Enfrascada en una tesitura que de ningún modo se simula con las palabras enaltecedoras hacia su marido muerto. Uno de los dos está históricamente equivocado. Y deja al país en off side. Fuera de juego.
Juntos, El Furia y La Doctora plantaron a la Argentina en el desconcierto. En una contradicción que pasa, en el fondo, con soda y sin inconvenientes. Porque, salvo Carrió, en el plano local ninguno de los presidenciables parece brindarle la menor magnitud a la circunstancia internacional. Pese a disponer de preparados asesores en la materia.

La Banca

Aunque parezca mentira, el portal admira, en el cristinismo, la audacia.La Argentina que bancaSin la menor credibilidad externa. Defaulteados y desacatados. Sin contemplar la menor estrategia de acuerdo o conciliación. Y mientras se devora las reservas del Banco Central raquitizado, La Doctora -máxima representación institucional de la Argentina- provoca. Grita que “con esta presidenta el país nunca más va a ser punto”.
En adelante, con La Doctora en su ocaso, la Argentina está para ser “banca”.
Y es aplaudida y celebrada por los violadores de sexo fláccido. Por los internados en terapia intensiva que se sienten en condiciones de desafiar al Pentágono entero.
¿Cómo no admirar semejante caradurismo?
La Doctora se distancia de Estados Unidos justamente a través de la delicada cuestión de la energía nuclear. El as de denuncia que Nisman mantenía oculto, acaso, en la manga. Ampliaremos.
Lástima que la toma de distancia con los Estados Unidos sea apenas preventiva. Resulta de utilidad para justificar previamente el escandaloso fracaso de la delirante conducción.
La Doctora mantiene el estilo envolvente para envolver, incluso, el propio fracaso de la (falta de) gestión que sólo se sostiene con el fantasma de las conspiraciones.
Con los desestabilizadores feroces que no vacilan en abrir los paraguas del hastío, y marchar en silencio.
Con el cambio geopolítico, La Doctora descalifica al marido mientras lo homenajea. Cambia también el enfoque, y cambian las hipótesis para tratar el atentado a la Amia que nos acompaña hasta la posteridad. Cambios que se registraron a través de la diplomacia amateur (Timerman). Y la diplomacia marginal, compuesta por los personajes entrañables escapados de una novela de Roberto Arlt.
La Argentina que bancaSon los ítems que el infortunado fiscal Nisman les lega al fiscal Pollicita. Para que los trate el juez Rafecas. Entre los aprietes memorables del cristinismo envolvente, que banca su descalabro y se desestabiliza en soledad.

Conocé el nuevo billete de $50

El Banco Central (BCRA) pondrá en circulación en marzo una nueva serie de billetes de curso legal de 50 pesos en homenaje a la defensa de la soberanía nacional



La nueva serie que lleva el nombre de "Islas Malvinas. Un amor soberano", se inicia con el número 00.000.001 A y será distribuida a través de las entidades financieras y las redes de cajeros automáticos mediante los mecanismos habituales.
Los nuevos billetes coexistirán en su uso con los actualmente vigentesde esa denominación.